Hay personas que dicen que los gatos tienen telepatía por la gran capacidad de comprensión que demuestran hacia sus dueños. Estos animales se concentran tanto en el estado de ánimo de las personas, en sus posturas y movimientos, que llegan a percibirlas y a entenderlas hasta un límite difícil de imaginar. ¿Por qué no íbamos a hacer los mismo nosotros?
Muchos de los comportamientos de nuestro gato son instintos innatos o tienen como origen su relación con la madre cunado eran cachorros, o provienen de su comportamiento sexual.
Revisemos algunos comportamientos de los gatos para entenderlos mejor:
- Si el gato frota la cabeza o la nuca contra las piernas de alguien, está demostrando amistad.
- Si mueve la cola, baja las orejas, se encoge y se le eriza el pelo, significa que está enfadado.
- Lamer para un gato puede tener que ver con instintos de cuidado o instintos sexuales, así que si un gato nos lame tenemos que interpretarlo como un gesto amistoso. Esto adquiere sentido si tenemos en cuenta que la madre lame la zona anal de sus crías durante sus primeros días de vida. Un gato también lame a una gata si está intentando cortejarla, como una demostración de ternura.
- Seguro que os suena la imagen de un gato amasando una manta o un jersey que encuentra en el sofá. A esto se le llama pataleo o amasado. Este comportamiento nace en una edad muy temprana del gato, mediante el pataleo, estimula la salida de la leche de su madre cuando es muy pequeño. Si realiza esta acción en nuestro cuerpo, que no deja de ser un suave masaje, significa que el gato tiene plena confianza con nosotros.
- Ya hemos hablado en otros artículos sobre el ronroneo, ese sonido relajante que emite nuestro gato cuando está tranquilo y lo acariciamos. Los gatitos empiezan a ronronear desde muy pequeños, mientras están mamando.
- Jugar es un comportamiento que tienen desde muy pequeños, con su madre y sus hermanos, a los usa como presas, como si fueran ratones o ratas. En realidad está poniendo a prueba su comportamiento combativo. Les gusta mucho también jugar con personas, a las que aceptan, igual que a su madre y a sus hermanos, como compañía para juegos. Si jugamos con una pelota, él la verá como si fuera una presa debido a su instinto cazador.
- Si un gato huye, no es aconsejable perseguirle para detenerlo. Por instinto, seguirá corriendo pero no puede hacerlo durante muchos kilómetros, así que rápidamente buscará un lugar para esconderse. Lo mejor es no correr. Debemos intentar no perderle de vista hasta que se esconda e ir después a buscarlo. Al acercarnos, lo ideal es disimular y fingir que no lo estamos viendo, después, le podemos hablar con calma, acariciarlo y con suavidad, cogerlo para llevarlo a casa de nuevo.
Artículo por: Miperroesunico.com
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